jueves, 5 de junio de 2014

Periodismo moderno, pero periodismo

Por Alejandra Santos

Desde la segunda guerra mundial se plantearon y se aprobaron una lista de derechos humanos, basados en el respeto, la dignidad y la igualdad de cada persona, derechos que cobran valor desde el momento en que nacen los seres humanos.  
Sin duda alguna uno de los derechos principales, que tanto se vulnera hoy en día, es el respeto por el otro; la libertad de pensar y hablar se han establecido como derechos que no pueden ser violados bajo ninguna circunstancia, que están íntimamente unidos con la libertad de expresión y por tanto con la moral “Artículo 20 de la constitución política de Colombia de 1991: Se garantiza a toda persona la libertad de expresar y difundir su pensamiento y opiniones, las de informar y recibir información veraz e imparcial, y la de formar medios masivos de comunicación. Estos son libres y tienen responsabilidad social. Se garantiza el derecho a la rectificación en condiciones de equidad. No habrá censura”[1]
Si los derechos humanos son universales, también existen códigos de ética que rigen el ejercicio profesional de los individuos en una sociedad, así como se puede demandar y hacer pagar condena a quien construye mal un puente o un edificio, de la misma manera en el oficio de periodistas, se debe respetar los códigos de ética y de esta forma lograr un buen ejercicio periodístico sin atentar   contra el buen nombre de otra persona, empresa, entidades del gobierno, etc. Quizá muchos profesionales de la comunicación caen en el abismo u olvidan los parámetros éticos como los señalados en el código de ética del Círculo de periodistas de Bogotá http://circulodeperiodistasdebogota.com/wp-content/uploads/2012/02/1CODIGOETICACPB2006.pdf,  con el afán de sacar una nota adelante, porque no encuentra fuentes, o simplemente “porque se le da la gana”.
El camino al que quiero llegar es simple, basta con mencionar el rol del periodista, el cual “en un principio está basado en la moral que es el conjunto de costumbres adquiridas durante el proceso de formación en familia; y que luego son reforzadas con la ética aprehendida ya en la escuela de formación superior, igual o más importante como lo es informar veraz y completamente, guiar a la opinión pública y trabajar por el bien común”[2]; es decir, el periodista es o no es, es como los ladrones comunes, ellos roban y los hacen pagar condena ¿y algunos mandatarios públicos? ¿Ellos roban o toman prestado? , si se aplicara la ética y sus principios como legalmente deberían ser, los ladrones de cuello blanco también pagarían condena; pero bueno ese no es el punto de discusión, lo importante aquí es que el medio no cambia la responsabilidad ni el deber ser de un periodista, pero con la implementación de toda la nueva tecnología las cosas sencillamente se han salido de casillas y es aquí donde se da inicio a este artículo.
La internet que ha sido la plataforma a través de la cual las nuevas tecnologías de la información han surgido y tomado fuerza, ha sido también un espacio de reconocimiento para movimientos sociales, fundaciones, organizaciones, sindicatos que de alguna u otra manera se habían visto durante mucho tiempo excluidos por la agenda setting de la mayoría de los medios de comunicación; espacio que ha servido para acercar a varias personas que se encuentran lejos, al precio de alejar aquellas que se encuentran alrededor en el diario vivir… Parece de ensueño, pero como “de eso tan bueno no dan tanto”, todo lo que el ser humano ha creado a través de su “evolución” ha traído nefastas consecuencias.
“Para aquellos a los que no extasía navegar en la internet, pero que sí se ven afectados por los despidos, la falta de servicios sociales básicos, la delincuencia, la pobreza y el trastorno de sus vidas; la globalización no es sino una versión recalentada de la ideología capitalista tradicional”[3] ; en definitiva se puede afirmar que la “globalización” ha influenciado y trastornado la sociedad en la que hoy se vive, pero sin duda un aspecto del diario vivir que más ha sido transformado son los medios de comunicación "El capitalismo moderno dispone hoy en día de las herramientas necesarias, en particular en el terreno de las telecomunicaciones, para desarrollar su poder. Si hay un sector de la actividad humana afectado por los dos tipos de cambios, es el de los medios”[4], es imperante entonces mencionar el actual caso del candidato a la presidencia Oscar Iván Zuluaga y el hacker Andrés Sepúlveda http://www.semana.com/nacion/articulo/el-video-del-hacker-con-oscar-ivan-zuluaga/388438-3, escándalo que dejo abierto a la luz pública las mentiras del aspirante a la presidencia y el poder de información que se puede tener por medio de las TICs, y ¿por qué no? También le hizo honor al adagio popular “le salió el tiro por la culata”.
Pero esté suceso es solo un ejemplo para poder resaltar que la información que circula por internet tiene el deber ser de veracidad, responsabilidad, rectificación y réplica, como en cualquier medio; “Los mismos políticos utilizan las empresas periodísticas como herramientas de marketing político. De tal modo que los medios de comunicación se encuentran en el centro de un juego entre poderes políticos y económicos, y muchas veces son víctimas de aquel juego”[5].
Decir que los medios de comunicación están en medio de un juego donde salir quemados es un susurro, lo que en realidad está ocurriendo es mucho más grave de lo que se podría haber esperado, en la web la mayoría de las personas (incluyendo periodistas) tienen perfiles individuales y que por ende son vulnerables en cualquier momento, sea por la información o por la opiniones que publican y hasta crear suplantación de identidad o perfiles falsos, como le sucedió a Julia Otero quien fue presentadora y directora del programa “La radio de Julia, en onda cero” quien aunque no es periodista de profesión “fue víctima de un delito informático de suplantación de identidad en el que publicaron un artículo y ella figuraba como la autora de dicho artículo”[6].
Por otra parte no podemos decir que todo en la internet es malo, existen leyes que regulan la información y los delitos informáticos (Ley 1273 de 2009 http://www.alcaldiabogota.gov.co/sisjur/normas/Norma1.jsp?i=34492) pero hay que hacer buen uso de esta ley, no es un juego como la línea a la policía no falta quien la utilice para decir mentiras como “el pastorcito mentiroso” que de tantas mentiras no le volvieron a creer, y entonces hoy se quejan porque la policía llega tarde; y además de un buen uso hay que denunciar, hacer valer la ley que se encuentra a disposición para la protección de ciudadanos y por supuesto de periodistas y otros profesionales, porque a veces no basta con cerrar el perfil de Facebook para evitar chantajes o amenazas ni tampoco con denunciarlo a la raíz de las redes sociales, es relevante darlo a conocer ante los entes de regulación de información y delitos informáticos para hacer valer el mínimo de justicia estipulado en la constitución.
Para concluir este artículo hago mención de un adagio popular “soldado advertido no muere en guerra”, a fin de poner en claro que los delitos informáticos y la vulnerabilidad de los datos que circulan en la web están a la orden del día, que solo basta dedicar unas cuantas horas a navegar para encontrar millones de información acerca de cualquier persona, no hay que abusar de las redes pues “todo en exceso es malo”, es decir, no publique cada suspiro que dé, si la privacidad llega a ser violada hay que denunciar y por último y no menos importante tenga en cuenta el bien común y “no haga a otros, lo que no quiere que le hagan a usted”.



[2] RESTREPO, Javier Dario – HERRÁN, María Teresa “Ética para periodistas”, Cap. 5 “El bien común”, pág. 139
[3] CASTELLS, Manuel. Comunicación para el cambio social: Lecturas históricas y contemporáneas. “Tecnologías de la información, globalización y desarrollo social”.
[4] En línea: http://www.saladeprensa.org/art409.htm Bucaramanga, 20 de Mayo de 2014, a las 16:41.
[5] En línea: http://www.saladeprensa.org/art409.htm Bucaramanga, 20 de Mayo de 2014, a las 17:03.

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